
Dos testigos que ya declararon en el expediente por la muerte de Diego Armando Maradona revelaron que el jueves previo a su fallecimiento, el entrenador de Gimnasia tuvo un inconveniente con su médico personal, Leopoldo Luque, que tuvo un «empujón» de por medio, notificaron fuentes judiciales.
El incidente fue expuesto en las declaraciones testimoniales de uno de los enfermeros que asistieron en las horas previas a su deceso a Maradona y en la de Romina Milagros Rodríguez, la cocinera que hace años acompañaba al técnico.
Según lo manifestado por el enfermero, la situación se produjo el jueves 19 de este mes, en la que habría sido la última visita de Luque a la casa en San Andrés de Tigre, donde Maradona se recuperaba de su reciente neurocirugía por un hematoma subdural.
El enfermero confesó que ese día Maradona insultó a su médico, lo echó y hasta hubo «un empujón».
La cocinera también se refirió a este episodio aunque aclaró que ella no fue testigo directa, sino que se lo habían deslizado y agregó que era habitual que Diego echara de la habitación a sus médicos y enfermeros.